“El año no va a terminar sin que el tema esté solucionado”, auguró Francisco Cabrera. Con esa frase, el ministro de la Producción nacional dio un impulso más a las expectativas que generó el proceso de evaluación para el ingreso de los limones tucumanos al mercado de Estados Unidos (EEUU). A la vez, fue uno de los mensajes que envió el funcionario hacia el norte argentino y las asimetrías históricas que existen con la zona de los puertos de Buenos Aires. En esa línea, hincapié ayer en el impulso de los proyectos sustentables que tengan que ver con las producciones regionales, como los son también el azúcar, el arándano, la frutilla.
Cabrera resaltó que el azúcar “no será moneda de cambio” en la negociación con Brasil por el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea (UE). “Para Brasil, el azúcar argentino es una molestia. Nosotros hemos pedido pararlo a Brasil en este proceso (por las barreras arancelarias existentes). Me parece que la argumentación de Brasil se centra en eso. Cuando se mete en otros mercados debe decirle: ¿quieres venir a destruir nuestro mercado cuando tu socio no te deja meter azúcar?”, enfatizó.
Bajo esa posición, el titular de la cartera nacional consideró que la posición brasileña es circunstancial y que la Argentina debe aprovechar el proceso de negociación para establecer una “plataforma única” con Brasil y alcanzar un acuerdo claro, en general, como ocurrió en el sector automotor. “Firmamos un acuerdo automotriz por los próximos cinco años. Ha sido un galardón”, recalcó durante de una charla con el gerente general de LA GACETA, José Pochat, y con periodistas de este diario. La atención del funcionario también fue para el sector textil y los efectos de la apertura de las importaciones. Comentó que durante el encuentro del Consejo Regional de la Producción (CRP) del NOA, donde impulsó el Plan Productivo Nacional, los empresarios de la región hablaron sobre los problemas de coyuntura, aunque “la preocupación muy viva es el tema de la integración al mundo”, es decir, las importaciones. La reunión se había realizado horas antes en el hotel Sol San Javier.
“Miedo” empresarial
“Les planteé que seguro hay empresas que están sufriendo las importaciones, con bajas en el consumo. Pero en el panorama general, no hay una oleada de ingresos de productos al país, bajo ningún efecto. Respecto del año pasado, las importaciones bajaron un 8% en el acumulado”, argumentó. Para el ministro, las críticas por el nivel de importaciones están vinculadas al “oportunismo político” y que el planteo de las empresas expresa “un miedo genuino”. “Es por las dudas”, añadió.
Según el ministro, en el ámbito textil se registró una importación acumulada mayor que los promedios y que su crisis está relacionada con el aumento de la importación y la baja del consumo. También tuvo incidencia la paralización de las aprobaciones de las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI)
“Esa acumulación de DJAI (desde el gobierno anterior) pegó en algunos sectores, uno de ellos fue el textil. Los textiles saben esto. Nos reunimos infinidades de veces (...) En julio se vencieron las DJAI, y en agosto, versus el mes anterior, las importaciones cayeron 17%”, destacó.
Cabrera expresó que escucha las críticas políticas y empresariales, pero que su posición se sustenta en las cifras. Por ello, enumeró unos indicadores para contrarrestar los cuestionamientos a la política de comercio exterior del gobierno de Mauricio Macri.
“El sector textil creció un 13% respecto del año pasado. El 2012 es un buen año para comparar porque no habían DJAI. Se importó un 6,8% del consumo de indumentaria; el año pasado, con DJAI, se importó el 4,6%. Mientras que nosotros terminaremos el año por debajo del 6%. Esa es la realidad, es lo que acordamos y es lo que estamos hablando con las cámaras”, enfatizó.
A su vez, como lo hizo días atrás, crítico la iniciativa impulsada por el diputado y referente del Frente Renovador (FR), Sergio Massa, que establece que las importaciones queden limitadas por 120 días, entre otras medidas. “Se equivocó y lo que hace es una irresponsabilidad. Les dije a los ministros que eso es muy irresponsable; está poniendo en riesgo, en serio, el trabajo de los argentinos”, manifestó.
Variables económicas
El funcionario expresó que el objetivo del Gobierno nacional es que durante el último trimestre de 2016, el índice de precios al consumidor oficial (mensual), “sacando el tema tarifas”, oscile entre un 1% y un 1,5%. “Si eso es así, vamos a terminar con un buen escenario el año”, manifestó.
“Vamos a terminar acumulando inversiones que se están haciendo (por proyectos de U$S 35.000 millones en total); con la inflación en baja; con un Brasil que dejó de caer tras dos años y medio de baja producción y consumo; nuestra obra pública, hoy en marcha tras la paralización, y con jubilados con mejores ingresos”, enunció Cabrera, entre otras variables económicas alentadoras, según su visión.
Potenciamiento de la región
Manzur y Cano agradecieron al ministro; la recuperación del Belgrano Cargas
El gobernador de Tucumán, Juan Manzur, celebró la reunión Estado-Estado y Estado-sector empresarial porque “en todo el mundo la articulación público-privada es el camino para generar soluciones”. Luego, en su cuenta de Twitter señaló: “Si al Gobierno nacional le va bien, a nosotros también. Acompañamos toda política que beneficie a las economías regionales”. El titular del Plan Belgrano, José Cano, también agradeció a Cabrera por potenciar las economías regionales. Además, resaltó la tarea para “recuperar el Belgrano Cargas y convertir a las rutas en autopistas para que nuestra región pueda aportar su potencial”. Se habló sobre una agenda para el Plan Belgrano Productivo, impulsado por el PEN para reducir las asimetrías en el NOA y potenciar la actividad regional.
Bajar el costo del capital
No satisface al funcionario el proyecto sobre cambios en las tarjetas que aprobó el Senado
“Uno de los ejes de nuestra tarea es la reducción del costo del capital. Y dentro de esto, el tema de la competencia. Por eso formamos la Comisión Nacional de la Defensa de la Competencia, con profesionales independientes. Ellos tomaron 11 mercados donde aparentemente hay posiciones dominantes (abuso) o prácticas monopólicas. Uno de esos es Visa”, detalló Cabrera. Dijo que no le gusta pelearse con el sector financiero, “pero si hay que hacerlo, nos pelearemos en caso de que estén en posiciones dominantes”. Agregó que le parecía “muy mal antecedente la ley (proyecto sobre cambios en las tarjetas) que se aprobó en el Senado. No la hubiera bajado a las comisiones. Hay que trabajar sobre la estructura del mercado dominante y no sobre los efectos”.
“Ganar por la gente”
Cabrera quiere lograr una elección con baja inflación e inversiones; empresarios y precios
Cabrera confió en que a fin de año la inflación estará controlada y que se notará el flujo de inversiones. “No nos gustaría pelear una elección comparándonos contra el abismo. Nos gustaría ganarla porque la gente diga que está bien. Se votó por un cambio en la forma y en la institucionalizad. Pero no necesariamente se votó un cambio económico. La gente quiere tener un empleo, comprarse un auto. Tratamos de hacer un gobierno que escucha y da marcha atrás cuando algo sale mal”, señaló. Luego dijo que el llamado de las centrales obreras a un paro general es “apresurado”, aunque recalcó que la CGT se manejó al principio más responsablemente que los empresarios. “Cinco días antes de la asunción, los empresarios subieron los precios fuertemente”.